VERANO EMERGENTE: ECO DE LOS NUEVOS LENGUAJES

El encuentro Verano Emergente organizado por la Mutual del Personal del Grupo San Cristóbal funcionó como un oasis en el sofocante febrero rosarino.

El jueves 8 de febrero tuvo lugar la inauguración de la muestra Verano Emergente en el Espacio Multicultural de San Cristóbal.  La exposición (abierta al público hasta el 21 de marzo) cuenta con una selección de obras de los artistas Leo Serial, Jazmín Giudici y Hernán Roperto bajo una curaduría que indaga sobre la identidad de una producción independiente que emerge desde la combinación del DIY y la potenciación de lo subterráneo.  

Según el texto del curador Anibal Bazán que acompaña la muestra, Rosario es “un hervidero de talentos silenciosos que crean espacios y trascienden sin necesidad de galerías de renombre o de museos“. Bazán, responsable del festival internacional de diseño Pixelations, remarca que para los artistas emergentes “todos los lugares son instrumentos, todo puede ser una herramienta, hacen solos“.  Finalmente, la reseña apunta que “las nuevas tecnologías, las series televisivas, las fiestas, clubes nocturnos, la música, los conciertos, los fanzines, los muros vacíos, son sus artefactos“.

Verano Emergente contó con la música en vivo de The Acustics, el proyecto paralelo de los Mamita Peyote, Eugenia (voz) , Charly (guitarra) y McHiuker (saxo), que aborda joyas del ska, soul y R&B de los 60.  El combo, en su totalidad, fue el puntapié inicial para el calendario de actividades culturales del Grupo San Cristóbal que ya anuncia la llegada de Nicola Constantino para el 5 de mayo.

Mientras afuera el centro rosarino se derretía en una jornada más del feroz verano, el vidriado edificio de calle San Lorenzo se tornó un oasis a través de un salvador aire acondicionado, refrescos, cerveza y los intercambios conversacionales propios de una apertura.  Luego de las breves palabras protocolares de bienvenida a cargo de Alfredo Cherara de San Cristóbal (“yo soy de más de hacer que de hablar”) la muestra quedó formalmente inaugurada.

En los luminosos pasillos del edificio de la esquina de Italia y San Lorenzo se reúnen lxs asistentes atentos a los trabajos colgados, comentando y tomando capturas con su propio celular. Entre trajes, remeras de The Beatles y Dos Minutos, vestidos de verano, sandalias, zapatillas y zapatos, la propuesta de Verano Emergente dialoga con varias generaciones curiosas por conocer obra de talentos rosarinos y la diversidad que imprimen en sus entregas.  

Lxs Protagonistas

Hernán Roperto es Rosarino y un talento que emergió desde la Escuela de Cine. Desde el vamos deja en claro su pertenencia al universo de la imagen dinámica en todas sus formas y abordajes posibles. “Soy realizador audiovisual así que mi mundo es el video, la imagen en movimiento”, comenta animado y seguro de su hábitat.
Sobre su participación en Verano Emergente explica que “lo de hoy es una excepción, mi objetivo es que cada cosa que hago termine proyectada en algún lado, sea el cine, en alguna pantalla de recital, en la fachada de alguna pared en un mapping. Es raro trabajar con imágenes fijas pero es un modo de experimentación así que lo hago de tanto en tanto”.
Los trabajos que se exhiben en la muestra dan testimonio de un hombre que se adentra en los vestigios posibles de un video investigado hasta el más mínimo detalle para luego dejarse arrastrar hacia el glitch. Al dejarse arrastrar dentro de la producción colgado en los pasillos de San Cristóbal pareciera que Roperto trazó un camino propio hacia el imaginario que el artista Rob Sheridan creó para el arte del álbum “Year Zero” de Nine Inch Nails.
“Desde 2008 arranqué a experimentar con video en tiempo real. Esa otra parte, otra faceta mía del video, es lo que me llevó a experimentar con el arte digital, la iluminación, la generación de imágenes por computadora escribiendo códigos, de hecho, las imágenes de la muestra están creadas o modificadas desde un código de computación”, explica. 
Al ser consultado sobre cómo desarrollar una identidad trabajando de manera autogestiva, Roperto responde con un sincero “No lo sé, sigo en la búsqueda” para luego extenderse bajo la experiencia de los años: Desde que empecé trabajé y desarrollé proyectos muy amplios y variados. Siempre ocupé distintos roles. Al principio fue una gran cantidad y sin discriminar qué tipo de proyectos encarar para probar diferentes cosas. Al pasar el tiempo fui discriminando y fui desarrollando proyectos que tengan que ver con mi gusto o con las ganas. Hay que priorizar con el tiempo, así todo se va enfocando más”.

Hernán Roperto, ojos de videotape.

Me dedico a la producción artística, más o menos, desde hace cinco años. Periodo que coincide con el momento en el que empecé a estudiar artes”, explica Jazmín Giudici desde algún lugar no develado donde se encuentra vacacionando.
Nacida en Casilda en 1994, Giudici estudió Bellas Artes con orientación al grabado en la Universidad Nacional de Rosario. Su producción se vincula a las artes gráficas y al collage, especialmente en serigrafía y dibujo. Giudici exuda instinto y desafío, virtudes esenciales del fanzine, trinchera de generaciones disidentes con el ímpetu de cuestionarlo todo.
Acerca de desarrollar una identidad artística desde el trabajo ciento por ciento independiente Giudici señala que “si bien me considero una artista independiente porque no formo parte de ninguna galería  existe un vínculo estrecho con la academia, y un circuito de amigos artistas que también son influencias, entonces desarrollo una identidad en lo singular y a partir de mis intereses estéticos y conceptuales pero también hay algo de influencia e identidad colectiva que se gesta en relación a los lazos y el lugar en donde uno está”.
A propósito de las problemáticas propias de desarrollar una obra en un escenario desde la construcción independiente, la nativa de Casilda afirma que “es complejo dedicarte por completo a la producción por motivos varios. Un obstáculo podría ser la inestabilidad económica y por otro lado la circulación y visibilidad de las obras, teniendo en cuenta  que nosotros los rosarinos no tenemos mercado de arte fluido”.

Leo Serial es rosarino y según sus propia voz desde la distancia del descanso veraniego “hace diez años que me dedico a esto. Arranqué a los 26 y tengo 36 ahora”. Serial cursó las carreras de Bellas Artes en la UNR y Diseño Gráfico en el Instituto Superior de Comunicación Visual (ISCV). Su obra es conocida para aquellos que sepan observar ya que actualmente trabaja como ilustrador, muralista y pintor para empresas, instituciones y privados. Además de cruzar sus creaciones en la calle, algunos de sus trabajos suelen habitar las redes sociales, compartidos por iniciativa de admiradorxs.
Parte de la obra curada para Verano Emergente advierte una admiración por la serigrafía oriental por donde el rosarino procede a crear una constelación psicotrópica personal. Sus trabajos son dueños de un dinamismo que pueden ubicarlo entre los museos de arte contemporáneo, las historietas y en cualquier rincón impredecible del arte urbano.
“Yo me dedico a tiempo completo a esto” comenta Leo, sobre su pasión, profesión y oficio.  “Los obstáculos que me vienen a la cabeza son los límites que te pueden poner los clientes” apunta sobre las dificultades que encuentra el artista en el campo laboral rosarino. Inmediatamente, agrega: “Por un lado te respetan, te llaman por tu trabajo pero después empiezan a pautarte muchas cuestiones que, un poco, te cortan las alas”.
¿Trabajando bien en su ciudad natal alguna vez consideró probar suerte en otro lado? “Considerarlo, sí”, responde. “El tema es que yendo afuera es partir de cero otra vez. Una buena opción es ir, de a poco, agarrando trabajos de afuera y volver para que se presentan nuevas oportunidades. Si surgen nuevas posibilidades en algún lugar en particular tal vez cuestión de quedarse”, apunta para luego finalizar, “quedarse de una es dar un par de pasos para atrás”.

 

Sobre las 21 hs, con la noche ya instalada y el calor cediendo en su intensidad, Verano Emergente estaba oficialmente inaugurado. Entre lxs presentes había una sensación de saciedad certera pero momentánea, ya que su curiosidad quería más. Pero fue solamente la primera entrega, el 2018 recién comienza.

 Texto . Lucas Canalda
Fotografías . Renzo Leonard

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